EL caballero del Bosque

a don Quijote le  dijo:

   –Quiero, señor, que sepáis

que mi elección o destino

de la sin par Casildea

su enamorado me hizo.

Hela nombrado sin par

porque este mundo no ha visto

otra tan bella y hermosa

como quien guía mi sino.

Casildea bien pagó

mis deseos encendidos

ordenándome ocupar

en los más graves peligros,

del modo que su madrina

con el gran Hércules lo hizo,

y en acabando con uno

otro me había servido.

Eslabonando trabajos

y sin sentirme cumplido

pesé Toros de Guisando

y a la Giralda he vencido,

bajé a la sima de Cabra

hasta el más profundo abismo

por traerle relación

de lo que había escondido;

y mis esperanzas muertas

y su desdén vivo, vivo.

Y ahora, en resolución,

me ha dado este nuevo oficio

de discurrir por España

andando por sus caminos

buscando a los caballeros

que me confiesen contritos

que ella es la más hermosa

de las damas que hayan sido

y que soy yo el más valiente

caballero que haya habido.

A todos los caballeros

que a mí me han contradicho

los reté en noble duelo

y a todos los he vencido.

De lo que yo más me precio,

aunque parezca inaudito,

es el haber derrotado

al caballero más fino:

don Quijote de la Mancha,

que con sus palabras dijo

que Casildea ganaba

a Dulcinea en el tipo,

en el talle y en la cara,

en sus modos y en su estilo;

y porque el tal caballero,

el don Quijote que digo,

a todos los caballeros

en este mundo ha vencido,

al yo haberlo derrotado

su gloria me ha transferido

y ya cuentan como mías

grandes hazañas que él hizo.

...