BLAS GIL. GAUCÍN. El alcalde de Gaucín, Francisco Ruiz, del PP, se encuentra en paradero desconocido desde el jueves, según confirmaron fuentes municipales, que insisten en que desde ese día no ha vuelto a aparecer por el Ayuntamiento, por lo que la secretaria municipal, Rosa Blanco, se ha visto obligada a nombrar como alcalde accidental al primer teniente de alcalde, el andalucista Francisco Macías.
Ayer fue imposible contactar con ninguno de los dos teléfonos móviles de Ruiz, así como del regidor accidental, al encontrarse en todo momento desconectados.
No obstante, la segunda teniente de alcalde, Carmen Cantudo, dijo ayer que Francisco Ruiz les comunicó a ella y a Macías el pasado jueves que se "ausentaba del pueblo", y que desde entonces "no saben adónde se ha ido ni por cuanto tiempo", argumentando que el motivo de su marcha puede obedecer a problemas personales.
Desde el PSOE, el único grupo municipal de la oposición, su portavoz, Teodoro de Molina, calificó la situación como de "esperpéntica", señalando que "un pueblo no puede tener a su alcalde durante tanto tiempo en paradero desconocido".
El edil socialista fue más lejos y afirmó que el alcalde del PP se ha ido de Gaucín "por que no ha aguantado la presión que supone tener a un Ayuntamiento en quiebra", recordando que actualmente se le debe las nóminas de los últimos dos meses a los funcionarios y las de hace cuatro meses al personal laboral.
El propio alcalde reconoció en febrero que el Ayuntamiento está en "quiebra", con una deuda arrastrada de más de 300.000 euros.
Era la segunda vez en menos de seis meses en la que el Ayuntamiento presentaba problemas para pagar las nóminas, ya que en septiembre de 2009 se produjo una situación similar y en aquel momento Ruiz amenazó incluso con cerrar la Casa Consistorial, ante la falta de liquidez y por no poder responder a los pagos con los trabajadores municipales.
Los sueldos de los empleados del Ayuntamiento (entre 30 funcionarios y laborales) suponen un desembolso mensual de 100.000 euros y los ingresos mensuales son mínimos.
Precisamente, el hecho de recibir las arcas municipales una serie de ingresos en los últimos días y no haber ninguna persona autorizada para pagar las nóminas, también ha podido propiciar un relevo tan rápido en la alcaldía.
Esta situación ha generado una gran alarma en el municipio serrano, en el que durante todos estos días la pregunta más frecuente entre los vecinos es: "¿dónde está el alcalde?".
Incluso algunos han llegado a afirmar que han visto su coche aparcado en una apartada casa de campo que el regidor tiene en el término municipal, aunque nadie ha podido confirmar este extremo.